El Diario publica una caricatura que apoya al boicot al Festival que se está desarrollando en Israel esta semana, Eurovisión 2019.
BDS/Apartheid
¿Los medios realmente entienden la violencia de Gaza?
Tras las escenas de violencia en la frontera de Gaza el lunes, Israel ahora es acusado por sus críticos de varios crímenes contra el pueblo palestino.
Terror Palestino: Titulares Impactantes
Comunicado del 10 de Marzo de 2016
Artículo traducido por ReporteHonesto de HonestReporting.
Durante las últimas horas han habido varios ataques terroristas en Israel. El peor incidente fue un palestino que acuchilló a varios en Yafo, matando a un turista estadounidense e hiriendo a varios otros.
Dos policías fronterizos resultaron heridos en un ataque a tiros en la ciudad antigua de Jerusalén, Israel, mientras que otro resultó herido en un apuñalamiento en Petaj Tikva.
Sin embargo, algunos de los medios de comunicación internacionales están más preocupados por los terroristas palestinos que de sus víctimas.
Este es el último titular del International Business Times:
Traducción: “Israel: Matan a tres palestinos mientras llega el vicepresidente de EEUU Joe Biden a dar pláticas”
Y el de New Zealand TV One News:
Traducción: “Fuerzas de seguridad israelíes matan a tres palestinos en incidentes separados”
Parecen estar confundidos en NBC News. “¿Un Israelí Acuchillando a la Violencia?” ¿Quién exactamente está acuchillando?
Traducción: “Matan a turista estadounidense entre la violencia israelí mientras llega Biden a dar pláticas”
Para el The Irish Times, un estadounidense simplemente ‘murió’ a manos de, no un terrorista palestino, sino un “atacante de Tel Aviv”, mientras que el subtitular se aseguró de dar la impresión de que los palestinos simplemente habían sido muertos a tiros sin identificarlos como los verdaderos asaltantes terroristas:
Traducción: “Muere estadounidense después de que un atacante en Tel Aviv acuchilla a 10” – Matan a 4 palestinos durante ataques en Israel mientras visita el vicepresidente de EEUU. Joe Biden.
La BBC también tuvo dificultades para identificar a los atacantes. Como es de costumbre el estilo de la BBC, no pueden responsabilizar a los palestinos:
Traducción: “Muere uno y varios heridos en ataques a israelíes”
Mientras estos ataques continúen, seguramente seguiremos leyendo este tipo de titulares. Si encuentras alguno no deje de enviárnoslo a contacto@reportehonesto.com
Ola de Terror en Israel: Impactantes titulares de la BBC
Hemos compilado para Ud. los artículos que han publicado nuestros amigos de HonestReporting sobre la BBC.
Dos hombres israelíes fueron asesinados a cuchillazos en la Antigua Ciudad de Jerusalén el pasado sábado. Las fuerzas de seguridad mataron al atacante palestino cuando éste abrió fuego contra ellos. La esposa e hijo de dos años de una de las víctimas también salieron heridas.
¿Cómo reportó BBC inicialmente este ataque?
Traducción: Palestino disparado a muerte luego de ataque en Jerusalén donde dos murieron.
Nótese cómo el foco principal de este titular es la muerte del palestino quien fue ‘disparado a muerte’, convirtiendo al terrorista en víctima muy eficientemente.
¿Y qué es exactamente un “ataque en Jerusalem”? Las ciudades no atacan a las personas. En este caso, la BBC no le otorgó su merecida responsabilidad a un palestino, así como tampoco indicó que las víctimas reales del ataque fueron dos judíos israelíes.
Molesto, sí. Sorpresivo, no. La BBC tiene un historial de publicar titulares donde santifican a los terroristas al punto en que objetos inanimados como una motosierra “cobran vida” y son los responsables de matar israelíes.
Mientras eventualmente cambiaron el titular a causa del gran escándalo en las redes sociales, es muy aterrador y molesto que inicialmente publiquen algo así.
LAS VIDAS ISRAELÍES IMPORTAN – FIRME ESTA PETICIÓN PARA BBC
Exigimos a la BBC la publicación de una disculpa y que tome las medidas necesarias para prevenir que vuelva a ocurrir. Los titulares que describen ataques terroristas deben indicar claramente quiénes son los terroristas y quiénes son las víctimas.
Por favor, firme nuestra petición para la BBC y ayúdenos a hacerles saber que las vidas israelíes importan.
Le pedimos que haga clic aquí y complete los datos que se requieren en el campo de color café.
A continuación les ofrecemos en español el texto que HonestReporting ha publicado.
Para el editor de BBC:
Su titular “Palestino disparado a muerte luego de ataque en Jerusalén donde dos murieron” del 3 de octubre es escandalosamente inexacto. Reconocemos que el titular fue eventualmente modificado, pero el daño ya lo habían hecho. El enfoque del titular original era la muerte del atacante palestino. Todos los que vieron eso en la página de BBC podrían entender que el terrorista de Hamas fue la víctima.
Este es un error inaceptable. Exigimos que la BBC publique una disculpa y tome las medidas para prevenir que vuelva a ocurrir. Los titulares que describen ataques terroristas deben indicar claramente quiénes son los terroristas y quiénes son las víctimas.
Las vidas israelíes sí importan.
Sinceramente,
Ola de Terror Palestino: Titulares Terribles
Comunicado del 15 de Octubre del 2015
Artículo traducido por ReporteHonesto de HonestReporting, escrito por SImon Plosker.
¿Son realmente responsables los palestinos de los ataques terroristas?
Según The Australian, de lo que tenemos que tener cuidado es de los buses y autos:
Traducción: Ataques de bus y auto en Jerusalén dejan muertos y heridos.
Mientras tanto, para Sky News es la propio Jerusalén la atacante. La palabra “palestino” ni siquiera está incluida en el subtitular:
Traducción: Policía Israelí: Ataques De Jerusalén Matan A Tres
Violencia fresca en Jerusalén deja varios heridos, incluyendo un ataque en un bus con cuchillo y pistola.
The Independent publica un titular que, para los desinformados, suena como si Israel es el atacante:
Traducción y NR: Ataques Israel – (se puede interpretar como ‘ Israel Ataca’): Pistolas, carros y cuchillos son las nuevas armas de la guerra en Jerusalén.
Los titulares de arriba son sintomáticos de una tendencia donde los palestinos son excluidos de los ataques terroristas que inician. En vez de eso, incluyen objetos inanimados y/o lugares geográficos para esconder la verdad – Los palestinos atacan israelíes.
¿Qué necesitan los medios para comunicar las cosas tal cual son?
Palestina: La Etapa psicótica
Comunicado del 13 de Octubre del 2015
Artículo escrito por Bret Stephens (The Wall Street Journal) y publicado en Hatzad Hasheni.
Si usted viene siguiendo las noticias desde Israel, podría tener la impresión que “la violencia” está matando a mucha gente. Como en este titular: “Palestinos muertos mientras que la violencia continúa”. O este primer párrafo: “La violencia y el derramamiento de sangre se irradia hacia el exterior, desde los puntos de inflamación en Jerusalén y Cisjordania, y ellos parecen estar cambiando de marcha y en vías de expansión, con Gaza cada vez más sumergida en la ola de violencia”.
Yendo más lejos, usted también podría tener la sensación de quien es, según los medios de comunicación occidentales, quien comete “esa violencia”. Como en este titular: “Dos adolescentes palestinos reciben un tiro de un policía israelí”, o: “El vengativo ataque israelí en la Franja de Gaza mata a una mujer y un niño, afirman los Palestinos”, nos informa otro.
Esa es la forma de describir las dos semanas de ataques palestinos que comenzaron cuando el Hamás mató a una pareja de judíos que se dirigían con sus cuatro hijos por el norte de Cisjordania. Dos días más tarde, un adolescente palestino apuñalaba a muerte a dos israelíes en la Ciudad Vieja de Jerusalén, y también hería a una mujer y a su bebe de 2 años de edad. Horas más tarde, otro palestino portador de un cuchillo fue muerto a tiros por la policía israelí tras haber atacado y herido a un niño israelí de 15 años de edad, en el pecho y en la espalda.
Otros ataques palestinos incluyeron el apuñalamiento de dos hombres israelíes de edad avanzada y un ataque con un pelador de verduras de un joven de 14 años. El domingo, un hombre árabe-israelí atropelló a una soldada de 19 años de edad, en una parada de autobús y, a continuación, salió de su coche, la apuñaló, y atacó a dos hombres y a una niña de 14 años de edad. Varios ataques han sido llevadas a cabo por mujeres palestinas, incluyendo un atentado suicida fracasado.
En cuanto a las causas de este fetiche sangriento palestino, las agencias noticiosas occidentales han recurrido a los patrones familiares. Los palestinos han perdido la esperanza en los resultados del proceso de paz, no importa que el presidente palestino, Mahmoud Abbas, acaba de declarar que los Acuerdos de Oslo son, para él, nulos. Los políticos israelíes quieren permitirle a los judíos rezar en el Monte del Templo, no importa que Benjamin Netanyahu haya negado eso y haya prohibido que políticos israelíes visiten el sitio. Siempre existe la vetusta fórmula del “ciclo de violencia” que sostiene que nadie y todo el mundo son responsables a la vez y al mismo tiempo.
Fuera de eso, la mayor parte de estas historias es, de algún modo, las historias que cuentan los líderes palestinos. Como si fuesen pepitas dispersas en el discurso que ofreció el Sr. Abbas el mes pasado: “La mezquita de Al-Aqsa es nuestra. Ellos [los judíos] no tienen ningún derecho de profanarla con sus pies asquerosos”, o: “Bendecimos cada gota de sangre derramada para Jerusalén, ya que es sangre limpia y pura, la sangre derramada para Allah”.
Luego viene el acicate del clero musulmán. “Hermanos, es por eso que recordamos hoy lo que le Dios les hizo a los judíos”, afirmó un imam de Gaza el viernes en un sermón filmado, traducido por la inestimable Instituto de Investigación Mediática de Oriente Medio, o MEMRI. “Hoy en día, nos damos cuenta de por qué los judíos construyen muros. Ellos no hacen esto para detener los misiles, sino para evitar el corte de sus gargantas”. Entonces, blandiendo un cuchillo de seis pulgadas de largo añadió: “¡Mi hermano en Cisjordania: Puñalada!”
Imagínese si un ministro blanco, digamos, de Carolina del Sur predica de esta manera acerca de los afroamericanos, con el cuchillo y todo: ¿Los medios de comunicación lo denunciarían? ¿Presentaríamos “los ambos lados periodísticos” de la misma forma que cuando se trata de los israelíes y los palestinos, con largas piezas que tratan de explicar y justificar de manera implícita los agravios que había sufrido ese ministro o la forma en que su país le había robado?
¿Y esto se complementará con la habitual falsedad matemática del oprobio moral, que es la moneda corriente de los periodistas que cubren el conflicto entre Israel y Palestina? En la versión de Oriente Medio, cuanto más alta sea la cifra de muertos palestinos más alta será la culpabilidad israelí (tal vez los paramédicos israelíes deberían dejar de tratar a las víctimas acuchilladas para ayudar a igualar el marcador). En una versión estadounidense, ¿deberían los medios citar más la incidencia en los crimenes negros-sobre-blancos para “equilibrar” las historias sobre racistas blancos?
Yo no creo que deba ser así.
Tratados se han escrito sobre el estado mental del conjunto de los medios de comunicación a la hora de contar la historia de Israel. Dejaremos eso a un lado por ahora. La pregunta importante aquí es ¿por qué tantos Palestinos han sido atrapados por la actual lujuria de sangre – por qué razón una psicosis comunal les impulsa a sumergir cuchillos en los cuellos de mujeres judías, niños, soldados y civiles como si se tratase de un deber religioso y patriótico, como si fuese una orden moral. ¿Desesperación por la situación del proceso de paz, la economía? ¡Por favor! Es hora de dejar de proporcionarle a los Palestinos con las excusas que ellos mismos no se molestan en confeccionar.
Por encima de todo, es el momento de derrotar al odio. Entendemos todo el poder explicativo cuando se trata de la esclavitud americana o el Holocausto. Los entendemos todo cuando vemos el odio de los poderosos contra los débiles. Sin embargo, fallamos en ver ese odio cuando nos crea molestias sobre nuestras tendencias consoladoras entre la gente que es básicamente buena, o el deseo de ver las mismas cosas para “sus” niños, o cuando somos capaces de ser empáticos.
Hoy en Israel, los Palestinos están en medio de una campaña para acuchillar a los judíos a muerte, uno por uno. Esto es psicótico. Es malo. Calificar a eso de otra forma solamente sirve para ser apologista, y cómplice.
Ataques terroristas en Israel este último mes

Chile: Falsa acusación contra Israel
Comunicado del 9 de Febrero del 2015
El medio chileno El Ciudadano publicó hace dos días un artículo titulado “Israel encierra a niños palestinos en jaulas a la intemperie”.
En él, cita a un Comité Israelí contra la tortura, y afirma que se reveló un informe sobre el descubrimiento de niños palestinos encerrados en jaulas a la intemperie en lugares vallados o en jaulas durante el invierno.
Destaca también:
“Hace falta precisar que se trata exclusivamente de niños palestinos y que ningún niño israelí ha sido nunca sometido a tales prácticas”
Falsedad 1 – El Contenido es erróneo
El contenido del artículo, aunque el medio no informa de dónde fue extraído, es bastante similar a uno publicado por el británico The Independent en el pasado mes de Enero, que a su ves cita a otro publicado por el medio israelí Jerusalem Post.
Lo que se debe destacar es que en éste artículo los periodistas hicieron una Actualización que resulta totalmente fundamental para la noticia en sí misma.
Actualización: Después de la publicación original de su informe, el Comité Público contra la Tortura en Israel lanzó una versión modificada, reconociendo que la información de la Oficina del Defensor Público sobre los niños presos que se mantienen en jaulas no se refirió específicamente a los palestinos. Hemos modificado nuestro informe en consecuencia y deseamos dejar en claro la posición.
Entonces, The Independent aclara que no se trata específicamente de niños palestinos, dicho por la misma ONG acusatoria.
Pero El Ciudadano no se toma el trabajo de recopilar la información correcta e imprescindible para el contexto de la noticia.
Cabe preguntar, Israel encierra o no a niños palestinos?
Falsedad 2 – La Foto que acompaña
Hemos explicado infinidad de oportunidades que la imagen que acompaña es tan o más importante que el contenido de la noticia misma.
Muchas veces los lectores nos quedamos sólo con el titular y la imagen; obteniendo en breves segundos una conclusión sobre el tema.
En este caso, El Ciudadano escogió una imagen falsa para acompañar a una noticia errónea.
La foto que utiliza data de Agosto del 2010, y se trata de un grupo de niños palestinos haciendo fila para recibir sopa.
Fue publicada por Los Angeles Times en un contexto totalmente distinto.
Nos toca preguntar entonces, ¿por qué El Ciudadano habrá decidido publicar un artículo falso, con contenido erróneo y una imagen recortada que se ajusta más a la intención de la supuesta ‘noticia’ que a la realidad?
Los invitamos a escribir sus respetuosos comentarios a contacto@elciudadano.cl para pedirles las explicaciones y retracciones pertinentes.
Ex Corresponsal de AP Expone la Obsesión de los Medios para con Israel
Comunicado del 26 de Agosto del 2014
Artículo traducido por ReporteHonesto de HonestReporting, escrito por Simon Plosker.
En una condenatoria publicación aún no revelada en la revista Tablet, el ex corresponsal de Associated Press, Matti Friedman explica cómo y por qué los periodistas hacen pasar tan mal a Israel y por qué es importante:
Cuando la histeria disminuye, creo que los acontecimientos en Gaza no serán recordados por el mundo como particularmente importantes. Personas murieron, en su mayoría palestinos, incluidos muchos inocentes desarmados. Me gustaría poder decir que la tragedia de esas muertes, o la muerte de los soldados de Israel, van a cambiar algo, que marcan un punto de inflexión. Pero no lo hacen. Esta ronda no fue la primera en las guerras árabes con Israel y no será la última. La campaña israelí fue poco diferente en su ejecución de cualquier otra llevada a cabo por un ejército occidental contra un enemigo similar en los últimos años, a excepción de la naturaleza más inmediata de la amenaza a la propia población de un país, y los mayores esfuerzos, sin embargo inútiles, para evitar las muertes de civiles.
La importancia duradera de la guerra de este verano, creo, no miente en la guerra misma. Se encuentra más bien en la forma en que la guerra se ha descrito y respondido en el extranjero, y la forma en que esto ha dejado al descubierto el resurgimiento de un viejo y retorcido patrón de pensamiento y su migración desde los márgenes de la corriente principal del discurso occidental, a saber, una hostil obsesión con los Judíos. La clave para entender este resurgimiento no se encuentra entre los webmasters yihadistas, teóricos de la conspiración de basa, o activistas radicales. En cambio se encuentra en primer lugar entre las personas educadas y respetables que pueblan la industria de las noticias internacionales; personas decentes, muchas de ellas y algunos de ellos mis antiguos colegas.
Mientras que la manía mundial sobre las acciones israelíes ha llegado a darse por sentado, es en realidad el resultado de las decisiones tomadas por los seres humanos individuales que ocupan puestos de responsabilidad-en este caso, los periodistas y editores. El mundo no está respondiendo a los acontecimientos en este país, sino más bien a la descripción de estos eventos hecha por las organizaciones de noticias. La clave para entender la extraña naturaleza de la respuesta, por lo tanto, se puede encontrar en la práctica del periodismo, y específicamente en los múltiples errores que están ocurriendo en esa profesión, mi profesión, aquí en Israel.
Friedman revela que la cantidad de periodistas de la AP, al igual que otros medios de comunicación, es tan desproporcionadamente alto en Israel y los territorios palestinos en comparación con otros lugares.
Él invita a que los medios se tomen la tarea de tratar a los palestinos como víctimas pasivas de un Israel que es considerado como el único bando que merece escrutinio y cómo los medios de comunicación nunca se molestan en echar un vistazo a lo que es en realidad Hamás.
Cita ejemplos de historias que fueron enterradas porque no encajaban en el marco aceptado que trata a Israel como el centro de una implosión en Oriente Medio.
Inquietantemente, Friedman concluye:
Israel no es una idea, un símbolo del bien o del mal, o una prueba de fuego para la opinión liberal en las cenas. Es un país pequeño en una aterradora parte del mundo que está cada vez más miedo. Se debe informar tan críticamente como en cualquier otro lugar y entenderse en su contexto y en su proporción. Israel no es una de las historias más importantes del mundo, o incluso en el Medio Oriente; cualquiera sea el resultado en esta región en la próxima década, tendrá que ver tanto con Israel como la Segunda Guerra Mundial tuvo que ver con España. Israel es una mancha en el mapa-un espectáculo que pasa a llevar una carga emocional inusual.
Muchos en Occidente prefieren claramente la vieja comodidad de analizar las fallas morales de los Judíos y la familiar sensación de superioridad que esto les trae, a enfrentar una realidad triste y confusa. Ellos pueden convencerse de que todo esto es “un problema de los judíos y de hecho culpa de los Judíos. Pero los periodistas se dedican a estas fantasías a costa de su credibilidad y la de su profesión. Y, como Orwell nos diría, el mundo entretiene fantasías en su cuenta y riesgo.
La historia de Matti Friedman, escrita por un conocedor, merece ser leída en su totalidad.
Por favor, comparta el artículo de Friedman a través de sus propias redes sociales y asegúrese de sea leído por el mayor y amplio público como sea posible.
Los 5 mayores errores mediáticos de la Guerra de Gaza
Comunicado del 21 de Agosto del 2014
Artículo traducido por ReporteHonesto de HonestReporting, escrito por Alex Margolin.
Reportar durante tiempos de guerra puede ser el desafío más difícil para los medios de comunicación. Pero el conflicto entre Israel y Hamás revela, nuevamente, las severas limitaciones del periodismo tradicional.
Cinco errores mediáticos en particular, llaman la atención. Las mayores amenazas para la precisión y comprensión no nos llegan de artículos individuales tendenciosos sino de masas de artículos que se adhieren a las viciadas normas de periodismo hoy.
1. Las Cifras de Víctimas como Barómetro Moral
Benjamín Disraeli dijo que hay tres clases de mentiras: las mentiras, las malditas mentiras y las estadísticas. Las cifras de víctimas citadas en prácticamente todos los informes sobre la guerra de Gaza cumplieron con las tres. Los números no son confiables, el verdadero porcentaje de civiles es desconocidos y su significado aparece oscurecido por la falta de contexto.
Reporteros a menudo se basan en las cifras proporcionadas por el Ministerio de Salud de Gaza gobernada por Hamas a pesar de que Hamas tiene un interés estratégico en inflar los números.
Reuven Ehrilch del Centro Meir Amit de Información e Inteligencia dijo a The Media Line que su organización revisó 152 nombres suministrados por el “Ministerio de Salud del gobierno de Gaza”:
La lista se hizo a toda prisa y se hicieron cambios posteriores. Hubo una serie de nombres falsos listados; los detalles de los muertos son sólo parciales, haciendo la identificación sospechosa. Hay nombres que se utilizan más de una vez y algunos podrían haber sido asesinados por su propio fuego en lugar de por el ejército israelí. La lista no distingue entre civiles y agentes terroristas. Todos los muertos se enumeran como “shahids” [mártires].
Para dar sentido a los números, los medios de comunicación a menudo incluyen el porcentaje de los que murieron considerándolos como civiles. El número ascendió hasta el 80%, de acuerdo con informes de los medios.
Pero como el New York Times señaló cuando realizó una mirada más profunda a las cifras, que un sospechosamente elevado número de personas muertas eran varones entre las edades de 20 y 29 años, la edad primaria de los terroristas de Hamás que participan en los combates.
“Al mismo tiempo, las mujeres y los niños menores de 15 años, los menos propensos a ser blancos legítimos, fueron los menos representativos, lo que representa el 71 por ciento de la población y el 33 por ciento de las muertes en edades conocidas”, señaló el informe.
Otro elemento de distorsión fue la presentación de los números palestinos junto a los números de israelíes, que eran mucho más bajos, como si habría una relación entre las cifras, como un tanteador en un evento deportivo.
Estas cifras, sin embargo, tenían connotaciones morales, dando a entender, ya sea que Israel fue el agresor, ya que mató a muchos más palestinos, o que la amenaza contra Israel no era tan grave, ya que tan pocos israelíes murieron.
Pero eso no cuenta la historia real. No revela los esfuerzos que Israel ha hecho para proteger a su población civil y no toma en cuenta las formas en que Hamás pone en peligro a los civiles convirtiendo barrios residenciales en zonas de batalla.
Como Bret Stephens escribió en el Wall Street Journal:
La utilidad real del conteo de muertos es que ofrece a los periodistas y comentaristas que lo citan la posibilidad de atribuir la culpa implícita a Israel mientras evade preguntas sobre la responsabilidad última de la matanza.
Presentado como números en bruto, las cifras de muertos oscurecen más de lo que revelan.
2. El síndrome de “Periodistas Maltratados”
Cubrir Gaza plantea desafíos para cualquier reportero, no menos importante que el de la siempre presente presión de Hamás a adherirse a la narrativa palestina. Incluso los periodistas que nunca sufrieron amenazas directas sabían que estaban operando en territorio que no ofrecía protección a la libertad de expresión.
Y si su subsistencia depende de su capacidad para acceder a Gaza en el futuro, ellos sabían que reportar hechos que Hamás definiría como objetables los haría correr riegos de deportación, o listas negras, por lo menos.
La situación era lo suficientemente grave como que la Asociación de Prensa Extranjera (FPA) emitiera una mordaz condena de la conducta de Hamás hacia los periodistas, citando una serie de ejemplos que habían surgido durante las semanas de combates.
Incluso Hamas admitió que intimida a los periodistas:
Algunos de los periodistas que entraron en la Franja de Gaza estaban bajo vigilancia de seguridad. Incluso en estas circunstancias difíciles, nos las arreglamos para llegar a ellos y decirles que lo que estaban haciendo era cualquier cosa menos periodismo profesional y que era inmoral.
Sin embargo, sorprendentemente, la respuesta de algunos de los periodistas más influyentes que cubren Gaza era que todo el asunto fue demasiado explotado. El Jefe de la Oficina de Jerusalén del New York Times, Jodi Rudoren incluso llamó a la declaración de la FPA en un tweet como “sin sentido”.
¿Por qué restar importancia a algo que tuvo un efecto evidente en las historias que surgieron del conflicto?
Tal vez si los periodistas fueran completamente transparentes acerca de los retos que enfrentaron, apuntarían al hecho de que no deberían haber estado informando desde Gaza en primer lugar.
Como el periodista Michael Totten escribió tras la publicación de la declaración de la FPA:
La guerra de Gaza fue una gran historia, por supuesto, y tenía que ser cubierta, pero podría fácilmente haber sido cubierta desde el lado israelí de la línea. Cubrir ambos lados de la historia es, por supuesto, preferible siempre que sea posible, pero proporcionar cobertura equilibrada de Israel junto con la censurada desde Gaza es una forma de mala práctica periodística. Basta.
3. Fallar al No Divulgar Información Relevante
Mientras que muchos periodistas insistieron en que su trabajo fue hecho sin trabas por parte de Hamás, no podían explicar de manera creíble por qué había lagunas importantes en su cobertura. De manera prominente faltan, por supuesto, imágenes de combatientes de Hamás en acción.
Cuando la cuestión se planteó con el New York Times, la respuesta fue aún más mortificante que el error – el periódico simplemente no tiene fotos para publicar. El fotógrafo estrella del diario Tyler Hicks fue aún más lejos:
Si tuviéramos acceso a ellos [los combatientes de Hamás], los fotografiaríamos. Nunca he visto un solo dispositivo para el lanzamiento de los cohetes contra Israel. Es como si no existieran.
Hicks explicó que los terroristas de Hamas estaban luchando desde los márgenes, y si se aventuraban en las zonas públicas se convertirían inmediatamente en objetivos de ataques israelíes.
Lo suficientemente justo. Los combatientes de Hamas eran difíciles de encontrar. Pero no había escasez de fotos de palestinos que reaccionan a los ataques aéreos israelíes o que asistían a funerales. Tal vez si los fotógrafos se habían aventurado a salir de sus propios márgenes habrían visto algo.
Y tal vez los que lo hicieron fueron detenidos por Hamás.
Los medios de comunicación, sin embargo, tratan el tema tal y como dijo Hicks – como si no existieran lanzacohetes y el pueblo disparándolos. Al ver galerías fotos, una tras otra, es difícil decir que habían dos lados combatiendo y no sólo uno. Los medios tienen la obligación de hacerle saber a los lectores qué está faltando.
Y si no podían mostrarlo con imágenes, podrían haber hecho más para explicar que Hamás disparó rutinaria desde las áreas pobladas.
Por supuesto, mientras la lucha comenzó a apagarse, fotos y videos de los sitios de lanzamiento de cohetes comenzaron a surgir, planteando interrogantes sobre si las fotos realmente eran imposibles de obtener, o si las amenazas de Hamás fueron las responsables de su ausencia.
4. Énfasis excesivo en Fotos espeluznantes de la guerra
Mientras que prácticamente no hay fotos de los combatientes de Hamás durante los días de intensos combates en Gaza, no había escasez de imágenes de niños o bebés heridos en ataques aéreos israelíes.
Esas fotos fueron particularmente frecuentes en todo el Reino Unido y otras ciudades europeas y ayudaron a inflamar las calles de Europa y más allá, donde el sentimiento antisemita corrió a un punto álgido.
También tergiversaron gravemente los combates que tienen lugar en la Franja de Gaza. En conjunto con la ausencia de fotos de combatientes de Hamás el mensaje es claro: Israel es un agresor que apunta contra los niños.
5. Fallar al no declarar los verdaderos objetivos de Hamás.
A lo largo de las semanas de combates y especialmente durante los períodos de negociaciones para altos al fuego, los medios de comunicación afirmaron que la motivación principal de Hamás era la de aliviar el bloqueo en torno a Gaza o para abrir un puerto o aeropuerto.
Pero ¿realmente explica por qué Hamás pasó los últimos años construyendo un complejo de túneles y bunkers que llegó a través de la frontera y dentro de Israel?
¿Explica por qué el grupo terrorista optó por pasar de contrabando o fabricar miles, si no decenas de miles, de cohetes capaces de alcanzar el corazón de Israel? ¿O por qué sigue disparándolos contra civiles israelíes?
¿Es realmente buscar la paz con Israel o una relajación de las medidas de seguridad de Israel sólo para mejorar la suerte de la población de Gaza?
Sería más honesto señalar que Hamás está trabajando para lograr la aniquilación de Israel. Incluso tiene una carta fundacional que lo dice tan claramente.
Como S.E. Cupp escribió en el New York Daily News:
Rara vez es mencionado en un informe de prensa que el principal objetivo de Hamás, su meta máxima, lo que realmente quiere y lo que su brazo militar está diseñado y decidido a conseguir, es la destrucción total de Israel y la aniquilación de los Judíos.
Es un componente crucial que queda fuera regularmente en los informes de noticias. Sin embargo, cualquier historia que no menciona esto entre las principales demandas de Hamás no es una intelectualmente honesta o completa.
Pocos en los medios de comunicación parecen comprender esto, el efecto de los cuales ha sido la creación de una vaporosa y nebulosa equivalencia moral entre Israel y Hamás, que no está realmente allí.
Permitir que Hamas mantenga su estatuto pero ignorarlo y dejar que el grupo terrorista se presente como una fuerza moderada buscando lo mejor para el pueblo de Gaza distorsiona la realidad.
Los medios tienen la obligación de presentar el conflicto tal como es – la agresión de un grupo terrorista que trabaja para la destrucción de Israel y los esfuerzos de Israel para defender a sus ciudadanos. Un marco que pone a Israel y a Hamás en un plano de igualdad moral es otro caso de mala práctica periodística.